jueves, 11 de diciembre de 2008

El Ciclope de Toscana...


Es de madrugada y debo estar despierto, mi helicoptero esta por partir desde el hangar mientras la ciudad dormita. Comienzo por vestirme, revisar pilas, tarjetas, lentes; todo listo... Salgo abrigado por el frio de Diciembre, ese que aun no termina de llegar pero que se cuela por entre los pantalones bershka que compre anoche en compañia de Paloma. El taxi no hace mas de 15 minutos hasta la zona de despegue, entonces el motor de avispa se enciende, carbura, ruge y me debora... se eleva.
La Ciudad de Mexico permanece oscura y titilante desde arriba, la vista magnifica, el sonido constante del rotor hipnotiza pero no apendeja.
Y la lùz.... lo mas importante, se enciende.*

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